3 de enero de 2010

Celular nuestro de cada día

Celulares, gran red de información

THE ECONOMIST

Si su teléfono móvil pudiera hablar, revelaría mucho. Es obvio que conoce sus secretos más profundos, ya que tiene conocimiento directo de sus llamadas y mensajes de texto y posiblemente también de su correo electrónico y su diario personal. También sabe dónde usted estuvo, cómo llega a su trabajo, adónde le gusta ir a almorzar, a qué hora llega a su casa y los lugares a los que le gusta ir en el fin de semana.

Si se pudiera agregar ese tipo de información de grandes cantidades de teléfonos, sería posible determinar y analizar cómo la gente se mueve en las ciudades, cómo interactúan los grupos sociales, la rapidez del tránsito y hasta cómo se diseminan las enfermedades. Los 4.000 millones de celulares que hay en el mundo podrían convertirse en sensores de una red global de recolección de datos.

También podrían usarse para recoger información por vías más directas. Los sensores dentro de los teléfonos o adheridos a éstos, podrían juntar información de la temperatura, la humedad y el nivel de los ruidos, entre otros. De manera más directa, la gente podría enviar información desde sus teléfonos, por voz o mensaje de texto, a un depósito central. Podría ser una manera útil de reunir datos con celeridad durante una operación de ayuda ante un desastre o para hacer el seguimiento del brote de una enfermedad. Ingenieros, biólogos, sociólogos y trabajadores humanitarios están construyendo sistemas que utilizan celulares para detectar, monitorear y hasta pronosticar movimientos de la población, accidentes que afectan al ambiente y amenazas a la salud pública.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por participar. Deje su comentario a continuación.